Primal Rage

Reseña del juego

Ambientado en un mundo devastado por el impacto de un meteorito, la historia del juego gira en torno a siete dioses antiguos que han despertado en forma de criaturas prehistóricas colosales. Estas bestias son adoradas por los restos de la humanidad y luchan entre sí para hacerse con el control del mundo post-apocalíptico, conocido como "Urth". La historia y el entorno del juego proporcionaron un rico telón de fondo para el intenso combate, añadiendo profundidad a la experiencia general.

La jugabilidad de Primal Rage es típica de los juegos de lucha, en la que los jugadores seleccionan un personaje y luchan contra oponentes en partidas uno contra uno. Cada personaje tiene un conjunto único de movimientos, incluidos ataques especiales y posibilidades de combo. El juego se destacó por el uso de animación stop-motion para crear los personajes, dándoles una apariencia distintiva y realista, especialmente en comparación con los gráficos basados en sprites típicos de la época.

La mecánica de combate en Primal Rage era única por la incorporación de movimientos y ataques similares a criaturas. Los personajes podían morder, arañar y usar sus habilidades naturales en la batalla, diferenciando el juego de otros luchadores que presentaban principalmente personajes humanos. Este aspecto, combinado con el combate sangriento y visceral, hizo que el juego se destacara entre sus contemporáneos.

Primal Rage enfrentó cierta controversia tras su lanzamiento debido a su violencia gráfica y ciertos movimientos especiales que se consideraron provocativos. Esto provocó diversas reacciones por parte de la comunidad de jugadores y los censores, pero también contribuyó a la notoriedad y el atractivo del juego entre los jugadores que buscaban una experiencia de juego de lucha más madura.

La combinación del juego de lucha tradicional con un toque prehistórico distintivo le ha ganado un lugar como un clásico de culto entre los fanáticos del género.